¿Tu SIBO ha aparecido después de una gastroenteritis, intoxicación alimentaria o diarrea del viajero? ¿Fuiste a aquel viaje y desde entonces se te hincha la tripa? Tras una infección, ha podido quedar un SIBO 'solamente' o un SIBO con autoinmunidad. En este artículo veremos qué es el SIBO postinfeccioso y cómo saber si lo tienes.
Dichosa gastroenteritis
Una gastroenteritis te estropea las vacaciones. Comes algo en mal estado y pasas unos días sin poder salir del baño. Gastroenteritis significa inflamación (-itis) de las mucosas del estómago (gastro) y del intestino (-enter-) debido a una infección. Nos ha pasado a todos alguna vez.
La mayoría de estas infecciones alimentarias acaban resolviéndose bien por sí mismas, pero un 11% de las personas no se recupera, desarrollando lo que llamamos un síndrome de intestino irritable post-infeccioso (meta-análisis)(meta-análisis). Las intoxicaciones por virus son más frecuentes, pero se resuelven mejor que las de protozoos como la Giardia, que pueden complicarse mucho, hasta un 53% de problemas después del año de infección frente al 4% si son virus (revisión)(revisión). Si tienes la microbiota ya tocada, estos eventos pueden ser fatídicos (revisión). Encima de estropearte las vacaciones, tu tripa ya no vuelve a ser la misma 🙁
Los que tenemos además un fallo en los factores protectores del SIBO, como puede ser hipoclorhidria por gastritis o toma de IBPs (omeprazoles), disbiosis, mala motilidad, intestino permeable, problemas digestivos o el sistema inmune alterado, tenemos mayor riesgo de una gastroenteritis (revisión)(revisión).
Prevenir mejor que curar
Una intoxicación nos puede pasar en cualquier sitio, pero si vas a viajar lejos, toda prevención es poca. Ten muy presentes las recomendaciones para evitar la diarrea del viajero, ve a salud del viajero del Ministerio de Sanidad en tu ciudad. Si ya has tenido una intoxicación previa que te ha dejado huella, es muy importante evitar diarreas futuras porque el daño se puede agravar (revisión).
Las intoxicaciones son más frecuentes de lo que parecen. Según datos de la EFSA (Agencia Europea de Seguridad Alimentaria) hubo 4000 casos reportados en Europa en 2021, siendo Salmonella, norovirus y Campylobacter las causas más frecuentes. El parásito de turno ha podido hacerse hueco y quedarse con nosotros, causando daño y disbiosis. Incluso en esta revisión se preguntan si el intestino irritable podría ser una enfermedad infecciosa en este sentido.

Posible espectro de complicaciones en el intestino irritable postinfeccioso: disbiosis, atrofia vellositaria, intestino permeable, inflamación, SIBO, desconjugación de ácidos biliares, desregulación neurohormonal, intolerancias y déficit de vitaminas como la B12 (revisión).
Si has tenido una infección que te ha dejado problemas digestivos, primero hay que valorar que no haya quedado un parásito o sus toxinas con cultivo y PCR en heces. También que no haya algo más de fondo (una celiaquía, una enfermedad inflamatoria intestinal, obstrucciones, alergias...) que se haya podido desencadenar o manifestar con el viaje o la intoxicación.
¿Cómo se puede generar un SIBO a raíz de una intoxicación?
SIBO postinfeccioso
Tras la intoxicación, a parte del destrozo intestinal, puede ser que se desarrolle una autoinmunidad hacia nuestro propio intestino. El parásito ya no está, pero nos ha quedado la motilidad dañada. Vamos a ver cómo se desarrolla este SIBO, al que llamaremos “SIBO post-infeccioso”.
El mecanismo propuesto en el estudio de Mark Pimentel es el siguiente.
1º Se produce disbiosis y daño intestinal
El parásito que nos ataca genera unas toxinas en el intento de invadir nuestro intestino. Tras unos días, el parásito se consigue eliminar, dejando el desastre de su paso: disbiosis y daño intestinal. Hemos tenido una guerra en el intestino y una de cada diez personas no se recupera. El sistema inmune queda alterado, se produce dismotilidad, disbiosis, hiperpermeabilidad intestinal e inflamación crónica de bajo grado. Se acaba desarrollando SIBO por una disrupción en la microbiota, por el daño al intestino y daño a la motilidad (revisión).

A la izquierda: tras una infección por un patógeno, se produce disbiosis, daño intestinal, hipersensibilidad visceral, se afecta la motilidad, el sistema inmune y neuroendocrino, originando inflamación crónica de bajo grado. A la derecha, ves el mecanismo de acción de la toxina del cólera (Vibrio cholerae), que produce hiperpermeabilidad intestinal e inflamación (estudio).
2º Se genera autoinmunidad
El sistema inmune reacciona fabricando anticuerpos contra las toxinas del patógeno que nos ataca, que se llaman anticuerpos frente a la toxina B de distensión citoletal (anti-CdtB). En algunas personas, por si no fuera ya poco, el sistema inmune se confunde y sigue fabricando anticuerpos llamados antivinculina. Entonces se genera autoinmunidad hacia las propias células del intestino responsables de la motilidad, las células de Cajal. Este daño puede desencadenarse incluso meses después de la infección inicial.

Tras una infección por Campylobacter, se genera disbiosis, daño intestinal, SIBO y autoinmunidad hacia las propias células responsable de la motilidad, las células de Cajal, que quedan muy reducidas en número, con el consiguiente daño al sistema nervioso entérico y motilidad intestinal (estudio).
Tras una infección por Campylobacter, las etapas propuestas del desarrollo de lo que los estudios llaman "intestino irritable postinfeccioso" (o lo que yo llamo SIBO postinfeccioso) y que ves en la imagen de arriba, son estas:
- Días después de la infección, las vellosidades se ensanchan, las células epiteliales se hinchan y se libera toxina B de distensión citoletal (CdtB).
- De días a semanas después de la infección, hay una ruptura de la punta de las vellosidades y una disminución en la proporción de vellosidades a criptas. Además, se forman anticuerpos anti-CdtB.
- Meses después de la infección, mientras la histología del intestino delgado se normaliza, se forma SIBO. Está presente la antivinculina, con una disminución de células intersticiales de Cajal en el plexo mientérico profundo.

3º Se pierden las células de Cajal
Se ha comprobado que esta toxina B de distensión citoletal (CdtB) puede ser la causa del desarrollo de SIBO postinfeccioso porque se ha visto su causa directa en experimentos en ratones. No sería ético hacer esto en personas y en humanos se estudia después de una infección accidental. En investigación, se inyecta la toxina en la piel de los ratones y estos ratones desarrollan SIBO (estudio)(estudio). Se ve que cambia su microbiota del intestino delgado, pero no la del colon (estudio). Puede aparecer dispepsia (estudio) e incluso se afectan genes de expresión de permeabilidad intestinal, motilidad, dolor y ritmos circadianos (estudio). Se forma un círculo vicioso entre la mala motilidad que favorece el SIBO y la disbiosis que agrava la autoinmunidad, mala motilidad e inflamación de bajo grado (revisión).

En los cortes histológicos del intestino, se ve cómo se va perdiendo la estructura intestinal y las células de Cajal marcadas con las flechas (estudio)(estudio).
En resumen, el mecanismo de desarrollo sería: infección > toxina > autoinmunidad > daño nervioso a la motilidad (células de Cajal) > SIBO e "intestino irritable".
Como sabemos que el intestino irritable es un diagnóstico de exclusión que no nos dice nada más que "tienes problemas digestivos y no sabemos de dónde vienen", prefiero llamar a este tipo de SIBO "SIBO postinfeccioso". Porque a diferencia del "intestino irritable", en el SIBO postinfeccioso ya sabemos el mecanismo, sabemos que se genera SIBO y sabemos que afecta solamente al intestino delgado, no al grueso. Para mí es un cuarto tipo de SIBO donde trataremos también el daño autoinmune.

Si no tenemos una microbiota y un intestino fuerte y resiliente, una infección ha podido dejar mucho daño a su paso: disbiosis, SIBO, permeabilidad intestinal e inflamación. Meses después, algunas personas además desarrollan autoinmunidad hacia su propio intestino, quedando afectada la motilidad.

Tu pobre campamento intestinal atacado y tu sistema inmune viendo estrellas tras los mamporros.
Prueba para el SIBO postinfeccioso
IBS smart
Para saber si tienes este tipo de SIBO postinfeccioso con autoinmunidad, hay una prueba llamada IBS smart, de Gemelli Biotech, desarrollada por el Dr. Pimentel. La prueba consiste en medir en sangre la presencia de anticuerpos frente a la fracción B de la toxina citoletal (CtdB) y anticuerpos frente a vinculina (proteína de adhesión celular que se encuentra en la mucosa intestinal) mediante una técnica de laboratorio llamada ELISA. Es una prueba en sangre que se realiza presencial y online mediante laboratorios concertados, siempre mejor con consejo profesional.
Esta prueba sirve para saber si fue esta la causa de tu SIBO, si ha quedado autoinmunidad tras la infección y poder enfocarte en tratar no solo el SIBO, sino también la autoinmunidad hacia el Complejo Motor Migratorio (MMC). Hacer esta prueba es más adecuado si tienes diarrea de forma predominante y si recuerdas haber tenido una intoxicación alguna vez, aunque el desarrollo de los síntomas puede ocurrir meses después.

El IBS smart positivo parece más probable si hay diarrea (libro "The Microbiome Connection" de Mark Pimentel).
Cómo se interpreta el IBS smart
El resultado de la prueba IBS smart te dará unos resultados con índices de los dos anticuerpos antiCdtB y antivinculina.

Mi prueba IBS smart, negativa para ambos anticuerpos. Eso significa que aunque haya desarrollado SIBO por otras causas, no hay restos de infección ni se ha desarrollado autoinmunidad.
Si ambos anticuerpos son negativos, la prueba es negativa. Esto descarta este tipo de autoinmunidad generada por una infección, pero no quiere decir que no tengas SIBO o autoinmunidad por otros mecanismos (es mi caso).
Si solamente los anticuerpos anti-CdtB salen elevados, se sugiere que ha habido una infección pasada y hay probabilidad de que se haya quedado una disbiosis, pero no se ha desarrollado autoinmunidad hacia el intestino. Una cosa menos.
Si solo salen positivos los anticuerpos antivinculina, sí se ha desarrollado una autoinmunidad hacia tu intestino. El microorganismo responsable de la infección y los anticuerpos antiCdtB ya no están presentes, pero el sistema inmune queda KO, viendo estrellitas y acaba atacando tus células de Cajal. Además del desastre del ataque, tus soldados han quedado magullados y aturdidos, se confunden y atacan los carros de los propios ciudadanos.
Si ambos anticuerpos salen positivos, hay un 98% de probabilidad de que una infección relativamente reciente esté provocando autoinmunidad hacia las células de Cajal. Hay que tratar el SIBO o disbiosis y además la motilidad y la autoinmunidad.
Esta prueba tiene una especificidad del 90-98% y una sensibilidad del 43-52%, dependiendo de si sale solo uno de los anticuerpos elevados o si son los dos. Es un buen test con elevada certeza si sale positivo, pero si sale negativo no descarta SIBO y problemas digestivos por otras causas (estudio).

¿Qué hacer si el test IBS smart es positivo?
Tratamiento del SIBO postinfeccioso
Si tu test IBS smart es positivo con los dos anticuerpos elevados, a parte del SIBO y del daño intestinal que pudiera haber, tendremos que tratar la falta de motilidad y la autoinmunidad generada.
En este tipo de SIBO postinfeccioso los procinéticos van a ser un tratamiento clave que nos ayude a estimular la motilidad. Tomaríamos procinéticos farmacéuticos o naturales, siempre bajo consejo profesional. No los tomes por tu cuenta sin consultar porque tienen sus interacciones entre ellos y con fármacos que pudieras estar tomando.
Además, los ayunos nocturnos para estimular el Complejo Motor Migratorio (MMC) van a ser imprescindibles. Por eso es importante dejar al menos 12 horas de ayuno nocturno, si puedes, mejor 14 ó 16. Puedes leer más sobre cómo tratar la motilidad, tipos y usos de procinéticos en el artículo del blog "Motilidad y procinéticos".
Para tratar la autoinmunidad generada... pues no hay pastillas mágicas, ¡ojalá! Pero se puede mejorar. El uso de probióticos, la alimentación y el estilo de vida van a ser los pilares de su tratamiento, como si de otra autoinmunidad se tratara. Respecto a la alimentación, la base es una dieta antiinflamatoria, una inmunonutrición, o una dieta tipo paleo-evolutiva o paleo autoinmune. Hacer mucho ejercicio, descansar, gestionar el estrés y todo lo que tenga que ver con la hormesis nos ayudará (saunas, baños fríos, ayunos, sol, naturaleza, hipoxia intermitente, polifenoles...). No se suelen recomendar fármacos, pero sí suplementos inmunomoduladores: inmunobióticos (probióticos específicos que modulan el sistema inmune), vitamina D, omega 3, lactoferrina, micoterapia, adaptógenos, inmunoglobulinas...
Para saber cómo tratar el SIBO que haya quedado y tratar la permeabilidad intestinal, puedes leer los artículos "SIBO, tu guía de inicio" y "El intestino permeable".
Conclusión
Si tuviste una intoxicación alimentaria y desde entonces tienes SIBO, podrías tener un "SIBO postinfeccioso", donde a parte del SIBO-disbiosis y del daño intestinal, se genera una autoinmunidad hacia las células de Cajal, que son las responsables de la motilidad. Puedes saber si tienes este tipo de SIBO con la prueba IBS smart. Descarta siempre que no queden restos del patógeno con pruebas de heces.
Para el tratamiento del SIBO postinfeccioso, hay que tratar el SIBO, la permeabilidad intestinal, el daño generado por la intoxicación, y además, tratar la autoinmunidad y la falta de motilidad. Sigue una alimentación y estilo de vida antiinflamatorios como base para la recuperación.

Mecanismos que se entrelazan tras una infección gastrointestinal y el desarrollo de SIBO postinfeccioso con posible autoinmunidad.
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Si quieres saber más sobre el Intestino Irritable postinfeccioso, tengo el honor de colaborar con esta formación en la membresía de Slow Medicine Institute. La membresía de Slow está más dirigida a profesionales, aunque se puede unir cualquier persona interesada. En este curso hablamos sobre síndrome de intestino irritable postinfeccioso en general: definición, epidemiología, fisiopatología, diagnóstico y tratamiento, con resolución de dudas en las webinar en directo.
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